Museo Nacional de Ciencias Naturales |
El Museo Nacional de Ciencias Naturales nos ayuda a entender la biodiversidad
La problemática tasa de desempleo
Los datos de desempleo registrados por el INE también muestran como los grupos de edad más afectados por este son los jóvenes, existe una tasa de paro en el 2019 de un 49,7% en el grupo de jóvenes que tienen entre 16 y 19 años, aunque esta ha bajado de un 64% desde el 2011 y de un 31% para los que tienen entre 20 y 24 años, esta se situaba en 42,3% para 2011.
España los últimos años también ha llegado a liderar las listas de la unión europea como país en donde hay más jóvenes Nini, estos que no se encuentran trabajando ni estudiando con un 19,9%, lo que la sitúa en el tercer puesto más alto de la OCDE, no llegando a llegar al 16% en el que se encontraba en el 2007, justo antes de la crisis. Una de las causas de esta alta tasa de Nini se atribuye a que actualmente el trabajo que se ofrece, son trabajos que ofrecen bajas pagas y malas condiciones laborales, como los contratos temporales.
Actualmente España es uno de los países que más se ha visto afectado por la crisis del covid-19, lo que ha hecho que la lenta recuperación económica que estaba viviendo desde la anterior crisis se ralentizara aun más, las predicciones de la OCDE son que el empleo se mantendrá en una tasa “muy alta” por lo menos hasta el año 2022.
Liquats Vegetals, una apuesta por el cambio ecológico
En el 2018, la empresa alcanzó la posición 3 408 del Ranking Nacional de Empresas, con unas ventas de 62.104.914 €. En el Ranking de Empresas del Sector Elaboración de preparados alimenticios homogeneizados y alimentos dietéticos según ventas, obtuvo la posición 2.
Liquats Vegetals tiene implantado un sistema de gestión ambiental de acuerdo con la iso 14001,la energía que emplean es energía verde certificada. Sus envases son 100% reciclables y un 75% de origen vegetal. Su propósito es reducir el consumo de agua y apostar por ingredientes naturales y de proximidad.
Los inicios de la agricultura ecológica se remontan a los años 80 cuando aparecieron los movimientos de una minoría concienciada debido a los procesos de masificación que sufría el sector agroalimentario. El uso masivo de los pesticidas y fertilizantes en búsqueda de los intereses puramente mercantilistas, provocó que cada vez más gente se preocupara por su salud y bienestar optando por opciones más ecológicas y naturales.
Con el tiempo este movimiento fue creciendo y fortaleciéndose. En España, estos años han cobrado mucha importancia. Solamente durante el año pasado los consumidores españoles gastaron 5 millones diarios de euros en alimentación ecológica. Asimismo, el gasto anual per cápita se ha duplicado en los últimos cuatro años, y actualmente supone unos 42 euros por persona al año. Lo que supone 2 de cada 100 euros de la cesta de la compra de los consumidores.
Con estos años también ha cambiado el perfil de consumidor ecológico. Si anteriormente en su mayoría consistía en personas de entre 35-50 años, actualmente los conocidos millennials (con menos de 35 años) han ganado terreno convirtiéndose en el 30% de los consumidores de productos ecológicos.
Los alimentos “bio” se han convertido en un producto esencial en muchos lineales de grandes superficies. Los expertos calculan que en los próximos 10-15 años en Europa el consumidor solo va a demandar fruta y verdura que sea ecológica. España ocupa desde hace varios años el puesto décimo en consumo a nivel mundial.
España se ha convertido en el cuarto mayor exportador mundial de productos ecológicos con un valor de 895 millones de euros en 2017. Asimismo, es el primer productor mundial de aceite de oliva ecológico y de vino ecológico y el segundo productor mundial de cítricos ecológicos y de legumbres ecológicas. Se espera que la influencia de los productos “bio” siga aumentando ya que el 80% de los jóvenes agricultores que empiezan a trabajar a día de hoy lo hacen a través de la agricultura ecológica.
Estos productos combinan las mejores prácticas ambientales y preservación de los recursos naturales en su elaboración, emplean también técnicas tradicionales para fertilizar la siembra y así evitar los transgénicos, químicos o pesticidas. cuando se habla de productos ecológicos, nos podemos referir tanto a frutas, verduras y hortalizas como a carnes, legumbres y pescados. todos estos productos que se venden en los supermercados europeos, se pueden encontrar o diferenciar gracias al logo exclusivo de la Unión Europea para ellos.
Estos productos suelen ser en la mayoría de los casos más caros que los productos convencionales y suelen tener también un aspecto más feo y ser de menor tamaño. muchos de los alimentos ecológicos poseen más minerales a diferencia de los convencionales en el momento en que son recolectados o cosechados, aunque cuando estos ya tienen 15 días se ha observado que los ecológicos han perdido mayor cantidad de nutrientes.
Las empresas que se encargan de producir todos estos productos de alimentación ecológicos, no solo contribuyen a ofrecer productos de mayor calidad a todos los que optan por la opción ecológica, sino que también tienen como objetivos, frenar el cambio climático usando métodos de producción que benefician al planeta y tratan de evitar el éxodo rural. Muchas de estas empresas, también logran captar a muchos clientes y compradores ya que ligan el uso de productos ecológicos a tener una vida mucho más sana y con menos enfermedades, por lo que, estos alimentos suelen cumplir con un mayor número de controles que los alimentos convencionales.
En España actualmente se usan más de 2 millones de hectáreas para plantaciones ecológicas, aportando más de 80 mil puestos de trabajo, además, el 80% de todas las personas que empiezan a trabajar en la agricultura, lo hacen mediante la agricultura ecológica.